ROBOTS DE MI INFANCIA...

Este es un dibujo mío que conservo de la infancia, forma parte de una serie de 18 robots, todos sobre papel naranja y hechos con rotulador negro y gris para el cuerpo, y rojo y azul para las luces y los botones. Mi madre tiene bastantes más, pero estos los guardo yo con especial cariño y los ojeo de vez en cuando.

Recuerdo que mi padre traía a casa pequeños blocs de papel de colores, de los que usaba para tomar las comandas cuando trabajaba de camarero. Podía pasarme horas enteras dibujando con mi hermana con los rotuladores carioca y, ¿alguien se acuerda?, unas magníficas cajas de colores "JOVI" de plástico y forma hexagonal, que iban en una caja amarilla...

A veces siento haber perdido parte de la capacidad que tenía para dibujar entonces, disfrutando a la vez. Supongo que dibujar a esa edad sí que era un mero placer, no tenía nada de qué preocuparme, y no sabía nada de fechas de entrega, proyectos a realizar y encargos que muchas veces prefieres no hacer.

Pero otras veces sí que entro en una especie de estado en el que todo fluye, como entonces. Suele ser cuando dibujo en mis cuadernos, tomando un café o en mi mesa, da igual donde, porque me apetece y ya está. Y sin darme cuenta se me pasan las horas.

Es entonces cuando yo, por lo menos, me acuerdo de porqué dibujo y porqué me gusta dibujar: porque desaparezco, porque ya no hay nada más aparte de lo que veo, de lo que estoy creando en ese momento, desde arriba, como si fuera un Dios, y todo lo demás me la sudara completamente, como al niño de entonces.

Y bueno, que dejo de ponerme nostálgico para invitaros a ver alguno más de esos robots aquí.